SEGUNDO DÍA: AYUNTAMIENTO, PUENTE DE BROOKLYN, DISTRITO FINANCIERO, SOHO, BARRIO CHINO, LITTLE ITALY Y PATINAJE EN CENTRAL PARK

Habíamos quedado a las 08h00 en el hall del hotel para salir a desayunar, pero el "jet lag" ha hecho que algunos se retrasaran un poco, y hemos salido casi a las 08h20. Primer punto del Orden del Día: desayunar. Mientras, los profes se han encargado de adquirir las tarjetas MetroCard para movernos en la red de transporte público durante toda nuestra estancia en Nueva York.

Esta tarjeta va a ser, como decía Forrest Gump, "mi muy mejor amiga" durante nuestra estancia

Como veréis a lo largo de la crónica del día, el clima de hoy no nos ha podido salir mejor ni encargándolo...

Una vez desayunados, nos dirigimos al sur de Manhattan ("Downtown") hasta llegar al Ayuntamiento, que hemos visto por fuera. Del Ayuntamiento sale el Puente de Brooklyn, ese "oscuro objeto de deseo" para muchos de nuestros viajeros, puesto que hemos hecho un montón de fotografías.

El Ayuntamiento

Hemos cruzado el puente andando, como los campeones, hasta llegar al DUMBO que son las siglas de "Down under the Manhattan Bridge Overpass" (o "debajo del paso superior del Puente de Manhattan". Los nombrecitos se las traen...), donde hay un pequeño parque y las vistas son, simplemente, deliciosas. Y con restos de la nevada de días anteriores, simplemente, ESPECTACULARES.

De ahí al Metro, para dirigirnos al Memorial de la Zona Cero (o del "9/11", que es como llaman aquí al 11 de Septiembre; los yankis nombran primero el mes y después el día...). Allí hemos podido ver el monumento-fuente ubicado en el solar de una de las antiguas Torres Gemelas. También hemos cruzado el "Oculus", monumento de Santiago Calatrava, para entrar, al otro lado del mismo, a la iglesia anglicana de San Pablo, con su pequeño cementerio ahí, al aire libre en mitad de la ciudad. No sería el único que veríamos hoy...

Desde afuera el "Oculus" no parecía tan grande...

Seguimos nuestro paseo y llegamos al Century 21, que es como nuestro Corte Inglés pero en "outlet"; aquí hemos acordado un tiempo libre de 2 horas para comer y hacer compras. No sabemos si alguno/a ha comido, o ha invertido todo el tiempo en comprar ropa. Chollos como los pantalones Levi's, que encontramos en España a 80 €, rebajados a 29 $. "¡Que me los quitan de las manos, oigan!"

¡Y venga a darle a la hamburguesa...!

De ahí, a visitar "Trinity Church", la primera iglesia anglicana de la ciudad, también con su cementerio a la vista, entre rascacielos. Cuando menos, nos ha resultado curioso. 

Y al salir, nos hemos ido al Edificio de la Bolsa ("Stock Exchange") y hemos dado una vuelta por la zona, comprobando la atracción que ejerce sobre los turistas el famoso toro (y sus, digamos, atributos genitales), para continuar cruzando hacia Battery Park, el parque de donde salen los ferrys que van a la Estatua de la Libertad (que visitaremos dos días más tarde). 

En Battery Park nos hemos "liado" un poco, entre las ardillitas y los bailarines de break-dance, pero bueno, nos hemos recompuesto rápido, porque después de cruzar el parque hemos vuelto a coger el Metro para irnos al Soho, Chinatown y Little Italy. Hemos cruzado estas dos últimas rápido, porque el objetivo estaba meridianamente claro: las tiendas del Soho son uno de los mayores atractivos de Nueva York, en cuestión de compras: Hollister, Converse, Levi's, Victoria Secret... y un sinfín más de tiendas de marca a unos precios i-rre-sis-ti-bles. 

Aquí hemos disfrutado de una hora y media de "suelta", con punto de encuentro en la estación de Metro de "Prince Street". Sobre la marcha hemos decidido alterar un poco el programa, porque la verdad es que íbamos muy bien de tiempo, y hemos pasado al hotel para descargar bolsas y nos hemos vuelto a coger el Metro para subir a Central Park, ¡a patinaaaaaarrrrr! Por si habíamos andado poco este día, esto iba a acabar de reventarnos... 

Los que no han patinado han estado un rato en el mirador sobre las taquillas, viendo cómo patinaba la gente (y "echando unas risas", porque hemos visto unas cuantas caídas bastante cómicas, la verdad) y después acercándonos al "Cubo de Apple", la Megastore de la Quinta Avenida, a toquitearles los iPhones. El resto del grupo ha acudido allí al acabar el patinaje, con un balance de "0" lesionados (¡olééééé!) y cuando nos hemos juntado nos hemos bajado por la Quinta Avenida hasta llegar a nuestro hotel.

Aquí ya estábamos fundidos, Mirad, mirad lo que ha dado de sí el día: 34.673 pasos, 26 km y un mogollón de calorías fundidas (para compensar la ingesta de hamburguesas y pizzas).

Al llegar al hotel, un pequeño quorum para ver qué hacíamos, porque la verdad es que estábamos para el arrastre. Teníamos 3 opciones, para que cada uno escogiera la que quisiera:

1. "Estoy tan fundido/a que paso hasta de cenar y me quiero ir a la cama".

2. "Estoy tan fundido/a que me quiero ir a la cama, pero quiero salir a coger algo de comer para subírmelo a la habitación".

3. "Soy un/a 'cachas' y quiero seguir dándolo todo, irme a cenar, seguir comprando, ..."

La "3" no la ha escogido nadie...

Y esto es lo que ha dado de sí el día. ¿Qué os ha parecido? ¿A que ha estado súper aprovechado? ¡Pues mañana más!

PD: Nos encantan vuestros comentarios, Seguid, seguid comentando. ¡Besooooossssss desde NYC!